Un viaje hacia la sostenibilidad
Fuzl es una empresa de diseño de mobiliario con sede en Londres, fundada por Oliver Theobald, que diseña y construye soluciones de mobiliario inteligentes, fáciles de montar y que ahorran espacio pensando en la ciudad moderna. Oliver quería muebles elegantes y asequibles que estuvieran diseñados específicamente para espacios reducidos, pero durante su búsqueda, lo que descubrió es una preocupante falta de sostenibilidad en este tipo de muebles, que muy a menudo están hechos de materiales baratos y frágiles que no soportan el paso del tiempo.
Cuando se dio cuenta de que no iba a encontrar lo que quería, decidió crearlo él mismo. Y así nació Fuzl. Sus productos están hechos de madera maciza y utilizan una innovadora solución de clips para unir las piezas, lo que significa que no hay necesidad de herramientas, ya que el clip es un cierre manual.
Tras dos años de desarrollo, diseño y producción de una colección de cinco diseños de muebles innovadores, pruebas y certificaciones según los estándares de la UE, obtención de premios y recaudación de fondos, en Fuzl están listos para lanzar sus productos al mercado, pero no sin antes dar un paso en la dirección correcta para garantizar un proceso sostenible.
Conociendo muy bien la magnitud del reto de conseguir una fabricación realmente sostenible, Fuzl ha lanzado una campaña Kickstarter. Bajo el nombre de “un viaje hacia la sostenibilidad”, esperan ahondar en el oscuro mundo de los costes medioambientales ocultos y encargar un estudio exhaustivo sobre el impacto medioambiental de su cadena de suministro que les permita construir un negocio de éxito que devuelva lo máximo posible, tanto al medio ambiente como a sus compradores.
Hablamos con Oliver Theobald, fundador de Fuzl para descubrir más sobre este emocionante proyecto:
¿Cuál fue la motivación detrás de este proyecto, aparte de un piso pequeño y el precio prohibitivo de la vivienda en Londres?
OT – Durante mis 15 años en el mundo laboral había tomado una serie de decisiones que me alejaban cada vez más de lo que amaba (el diseño). Aunque todas estas decisiones me estaban dotando gradualmente de experiencias y habilidades que ahora utilizo como propietario de un negocio, ningún puesto había sido suficiente para mí. Quería dirigir mi propio negocio y quería que fuera uno que tuviera margen para alcanzar un mayor nivel de sostenibilidad medioambiental. Fue en ese momento, mientras pasaba gran parte de mi vida en trenes como vendedor, cuando empecé a dibujar muebles. Y fue en ese tren que finalmente me di cuenta de que la oportunidad de alcanzar mis ambiciones estaba a mi alcance, todo lo que tenía que hacer era perseguir mis ideas en muebles creando una nueva empresa: Fuzl. (Ese fue el comienzo de todo.)
¿Crees que Fuzl está inspirando un cambio en la industria de los muebles y en la forma en que la gente mira al mobiliario?
Creo que estamos entrando en una época en la que la gente es mucho más consciente de sus responsabilidades para con el medio ambiente. Realmente creo que la gente está motivada para cambiar a mejor, pero que a menudo la tarea puede parecer demasiado abrumadora, lo que conduce a un sentimiento natural de impotencia y, por lo tanto, de inactividad. Para empresas como Fuzl es más fácil tomar decisiones que mejoren el medio ambiente, pero lo más importante es que esto no imponga un incremento de precio masivo (de lo contrario, los beneficios sólo se sentirán a pequeña escala, limitando el alcance y la adopción de sus productos en función de la accesibilidad de costes).
¿Está Fuzl inspirando el cambio? Tal vez a pequeña escala, yo voy predicando entre todos mis conocidos, pero a veces parece poco más que una gota en el océano. Cada mueble de Fuzl que la gente compra me hace sentir mejor ya que es una opción más sostenible que una gran cantidad de muebles en el mercado, pero podemos hacer más, tanto de cara a la escala en la que trabajamos, como en la forma en que nuestros productos se fabrican, se envían, se adquieren y se entregan. Tal vez nuestro entusiasmo sea infeccioso, al menos eso espero.
Los muebles flat-pack parecen estar en auge. Todo el mundo hace muebles de envase plano ahora. ¿Qué hace Fuzl que los demás no hacen?
He estado observando la explosión de pequeñas empresas en el mercado que, a su manera, están redefiniendo lo que significa el envase plano. Me enorgullece que Fuzl sea parte de este movimiento y si nuestros esfuerzos combinados significan un abandono generalizado de las soluciones de muebles “de usar y tirar”, entonces no podría ser más feliz.
¿Qué estamos haciendo diferente? Bueno, cuando empecé esto, tenía la sensación de ser uno de los pioneros de esta nueva filosofía (incluso si se trataba de un engaño alimentado por mi propio ego). Ahora me doy cuenta de que hay muchas maneras de llegar a un mismo punto, y soy mucho más realista sobre lo único que es lo que hemos diseñado. Lo que creo que nos diferencia es que no sólo somos “apasionados” de la sostenibilidad por su valor de marketing. Realmente queremos hacer algo al respecto y nuestra motivación para aprender más sobre nuestro impacto y cómo podemos mejorarlo va a ser la marca de nuestra individualidad. Esperamos poder seguir obteniendo beneficios a pesar de nuestra ambición de ser sostenibles y poder soportar las dificultades de crecimiento de una pequeña empresa
¿Por qué Fuzl quiere ser más sostenible?
Hablé con una profesional de la sostenibilidad en un bar hace dos semanas y esa conversación me hizo pensar sobre mis propias ideas y opiniones al respecto. Parece que mi interlocutora se había visto recientemente asediada por un abrumador sentido de la magnitud e imposibilidad de esta tarea. Se burló de mis planes en torno a la sostenibilidad y cuestionó nuestros planes diciendo que “el mundo es una causa perdida, vamos a intentar matar al planeta y luego nos matará a nosotros”, recuerdo que esas fueron sus palabras exactas.
Yo no puedo ser tan fatalista, también me exaspero a veces y me siento en conflicto cuando veo el último programa de David Attenborough, pero a fin de cuentas sé que por muy corta que sea mi vida, mi hijo -que ahora tiene 4 meses- apenas está comenzando su viaje. Dando pequeños pasos (quizás imperceptibles a escala global) para mejorar mi propia sostenibilidad hago mi parte, y además le enseño a mi hijo a hacer su parte también. Todo lo que necesitamos es que la gente hable de mejorar, que encuentre pequeñas maneras de promover el cambio, y que informe a los demás de que cuándo se suma todo esto, estaremos mejorando en una escala global. Sé que esto parece ingenuo, de momento es todo lo que puedo ofrecer, y siempre es mejor que rendirse.
¿Por qué una campaña Kickstarter? La sostenibilidad puede ser un concepto un poco abstracto para algunas personas. ¿Por qué se necesita dinero para ser sostenible?
Creo que la compañía Patagonia lo expresó a la perfección: no se puede tener un negocio ambientalmente sostenible si no es antes económicamente sostenible. No importan tus buenas intenciones, si te declaras en bancarrota no tienes manera de promover cambios. Sabemos que llegar a una meta de cero emisiones y un amplio compromiso de sostenibilidad medioambiental es un gran reto incluso para una empresa pequeña y ágil. También estamos familiarizados con los costes de las opciones sostenibles tanto de los materiales sostenibles como de los procesos de producción, por lo que va a ser un largo camino, así que sí, necesitamos dinero, de lo contrario no podríamos seguir en el negocio.
Kickstarter es una forma de construir una pequeña pira, alrededor de la cual estamos bailando nuestra propia danza de la sostenibilidad. Pero lo más importante es que es una forma de conseguir apoyo económico para nuestro proyecto a través de la compra de muebles, lo que avivará un poco más el interés del público y, de forma lenta pero segura, nos permitirá ponernos manos a la obra. Kickstarter es para que todos aquellos que nos han dicho “oooh me gusta, quiero hacerme con una pieza”, puedan realmente comprometerse. Tenemos que vender muebles para marcar la diferencia y esta campaña Kickstarter es el comienzo de nuestra iniciativa para hacerlo.
A medida que avancemos y que nuestra empresa alcance la rentabilidad, podremos invertir en mejoras año tras año y a medida que pasen los años nos iremos acercando a nuestra meta cada vez más, compartiendo nuestros éxitos a lo largo del camino.
¿Y qué viene después de esto? ¿Dónde ves a Fuzl dentro de cinco años?
Si mis ambiciones más descabelladas se cumplieran, tendría un equipo de diseñadores, gurús de la sostenibilidad, expertos en operaciones y artesanos que fabricaran nuestros muebles a clientes de todo el mundo. Seríamos conocidos por nuestros nuestros avances y habríamos inspirado a otras empresas a tomar un curso similar.
Descubre más sobre el viaje hacia la sostenibilidad de Fuzl y forma parte de su iniciativa en Kickstarter aquí, y síguenos para hacerte con sus muebles..