LA EXCELENCIA DEL ECODISEÑO
En Good&Mojo – submarca de It’s about RoMi -, afincada en el canal más antiguo de Ámsterdam crean productos para la iluminación del hogar desde 1993 con trabajo duro, dedicación y sobre todo placer y compromiso con la sostenibilidad. Se inspiran en la vida urbana y la ciudad, pero también en la naturaleza para crear nuevos diseños simples pero con mucho carácter. Su objetivo no es otro que hacer el bien, creando para ello productos de iluminación sostenible mientras colaboran con proyectos de responsabilidad social.
¿Crees que el compromiso medioambiental es valorado por los clientes del siglo XXI? ¿Lo consideras una ventaja competitiva?
Estamos convencidos de que nuestro compromiso es valorado por nuestros clientes. A pesar de que algunos de ellos no son conscientes de ello a la hora de la compra (eligen nuestros artículos por su diseño, aspectos prácticos técnicos y no siempre debido a nuestro compromiso sostenible), una vez descubren nuestro compromiso con los materiales sostenibles, quedan positivamente sorprendidos. Ciertamente creemos que es una ventaja competitiva, pero también sabemos que este tipo de compromiso va ser lo que se espere de todas las empresas en el futuro.
Probablemente en unos años, las empresas respetuosas con el medio ambiente no destacarán sino que las ambientalmente hostiles serán penalizadas. Al menos, debería ser la norma. De todos modos, los clientes están empujando a las empresas a comprometerse con formas sostenibles de producción. Y los nuevos actores en la industria del ya están cambiando su apuesta. Tesla es un ejemplo inspirador y estamos seguros de que muchos otros se sumarán en los próximos años.
Lamparas Sequoia
A vuestro compromiso medioambiental se le suma vuestra responsabilidad social al ayudar a los desfavorecidos a través de la Fundación WakaWaka. ¿Qué es WakaWaka? Cuéntanos más sobre este bonito proyecto.
Estamos muy comprometidos con la fundación WakaWaka. Es una fundación holandesa, fundada en 2010, cuando su fundador visitó Sudáfrica para la Copa Mundial de Fútbol y se sintió sacudido por la cantidad de personas que aún usaban peligrosas lámparas de keroseno. Estas lámparas, además de contaminantes y costosas, son muy inseguras: vuelcan muy fácilmente y pueden causar enormes daños, matando a una gran cantidad de personas cada año (desde quemaduras a cáncer de pulmón). A través de crowfunding se desarrolló una lámpara solar más efectiva y eficiente, se empezó a donar lugares en situaciones desfavorecidas.
Cuando descubrimos esta gran fundación, pensamos que eran los socios ideales y así es como nuestro lema cobró vida “Comprar Luz, Dar Luz”. Por cada lámpara de Good&Mojo vendida, donamos 5% a la Fundación WakaWaka. Hasta el momento hemos donado más de 1300 lámparas, que no sólo ayudan a una persona, sino a toda una familia. Una luz ayuda a un pequeño a estudiar en la oscuridad de su choza, ayuda a sus padres a cocinar, y a su hermana mayor a caminar con seguridad después de la puesta del sol. Todo esto con una luz barata, segura y sostenible. Los proyectos actuales que apoyamos están ubicados en Bangladesh, Chile y Rwanda.
Hablemos del producto. Fabricáis lámparas cuya materia prima siempre se selecciona de entre las opciones más sostenibles, como el corcho, el bambú, etc. ¿Cuáles son los criterios para seleccionarlas?
Los materiales sostenibles son la parte más importante del proceso de creación de nuestras lámparas. Seleccionamos muy cuidadosamente cada uno y lo probamos varias veces. A menudo los materiales que son sorprendentes por su sostenibilidad, aspecto y tacto, no pasan la criba porque no son suficientemente rompedores o modernos. Queremos mantenernos alejados de un aspecto hippie, de los años 70, que puede ser muy fácilmente asociado a la sostenibilidad. Proporcionamos iluminación moderna, con un toque urbano.
El uso de materiales sostenibles no siempre es fácil porque trabajamos con proveedores para los que la fabricación de lámparas no es común. Buscamos materiales particulares, un buen ejemplo son nuestras lámparas de Yosemite y Yellowstone, que están hechas de pulpa de celulosa, como la que se utiliza en las cajas de huevos. Fue todo un reto hacer una muestra lo suficientemente grande para una lámpara industrial, pero encontramos la manera, ¡e incluso conseguimos un premio de diseño por ello! Así que sí, es cuestión de mucho trabajo y una mente abierta, pero las posibilidades son muy interesantes. Y al final nuestros proveedores también se involucran, porque ven en estos desarrollos una manera de generar riqueza para su familia y su entorno. ¡Todo un círculo!
Las lámparas Yosemite (izq.) y Yellowstone (dch.) están fabricadas en pulpa de celulosa, innovativas y sostenibles.
Se han lanzado al mercado recientemente un gran número de nuevos materiales sostenibles mediante impresión 3D. ¿Crees que esta tecnología podría revolucionar la industria a largo plazo?
Creo que el 3D será democratizado a la larga. Por ahora, todavía es complejo y costoso de producir, pero sin duda la tecnología 3D es una herramienta asombrosa para por ejemplo reemplazar piezas perdidas o rotas. Los clientes se están cansando de la corta vida de los productos actuales: “no lo repares, compra uno nuevo”. Es una filosofía ridícula, pero resulta mucho más barato. Hay algo que está funcionando mal y, en algún momento, la gente se va a dar cuenta.
Volviendo al 3D, es perfecto para reemplazar piezas que ya no se producen más pero además, si su uso se generalizase, reduciría los residuos relacionados con la fabricación tradicional, el cliente pediría un modelo 3D en una APP y lo imprimiría en su propia casa. No hay desperdicio, sólo se produce la cantidad necesaria. Lo mismo se puede aplicar a la moda. Por ejemplo, una máquina consumiría solamente la cantidad de tela necesaria. Y el hecho de que estos materiales puedan ser reutilizados y remodelados también es muy interesante. Así que sí, podría ser una revolución seria, pero creo que tendrán que pasar unos diez años antes de que podamos aprovechar esta tecnología de manera genérica en la industria.
Colección Mekong
Podemos observar que el diseño de vuestras lámparas sigue patrones muy diferentes de un modelo a otro. ¿Qué inspira estos patrones? ¿Qué otros ecodiseñadores os sirven de inspiración?
Nuestro equipo de diseñadores viaja por todo el mundo para descubrir nuevos materiales, pero también para inspirarse en nuevos modelos. Nuestro fundador, Rob van Dijk, y nuestra directora creativa, Norma Lugten, son los diseñadores de nuestras lámparas y se inspiran en todo lo que les rodea. A menudo comienza con el material en sí y todo lo que se puede hacer con él. Las técnicas tradicionales también son un punto importante de nuestro diseño. De ahí nuestro lema “volver a la sostenibilidad”.
Nuestras lámparas de bambú Sagano se tejen de la manera tradicional vietnamita. Estamos a punto de lanzar varios modelos en Rotan, que una técnicas ancestrales de Asia. Siempre estamos mirando hacia el futuro pero no queremos olvidar años de artesanía. Nuestro objetivo es proporcionar materiales sostenibles, con técnicas tradicionales combinadas un aspecto moderno. También nos centramos en el uso de la propia lámpara, que puede ser un artículo decorativo, pero tiene que ser práctica. Cada modelo está diseñado para un uso específico.
Las lámparas Sagano se fabrican mediante una técnica tradicional Vietnamita de tejido con bambú.
Después de más de veinte años en el mundo del diseño con la ya consolidada It’s About Romi y después de la creación de Good&Mojo, ¿Qué balance haces del recorrido de la empresa? ¿Cómo os enfrentáis al futuro? ¿Seguiréis especializándoos en lámparas?
De hecho, nos hemos convertido en grandes apasionados de la iluminación. Good&Mojo nos ha abierto grandes posibilidades de crecimiento, muy retadoras pero debemos quedarnos con lo que se nos da mejor. Todos nuestros años de experiencia los estamos implementando en Good&Mojo, porque creemos firmemente que es el futuro y estamos seguros de que superará a nuestra otra colección Citylights. Eso se traduce a corto plazo en poner mucho esfuerzo para que Good&Mojo sea aún más exitoso.
En septiembre lanzaremos nuestra nueva colección que se duplicará en tamaño, con nuevos materiales como la roca volcánica. Además, acabamos de terminar el nuevo catálogo con más de 50 páginas, lo que eleva la colección a un nivel superior. También queremos que los tecnicismos de las lámparas sean más fáciles de entender para el consumidor final. ¿Quién sabe qué es kelvin o lumen? Muy pocas personas, pero es un asunto importante, especialmente si te preocupa la sostenibilidad. También estamos buscando hacer que todo nuestro proceso de producción sea aún más sostenible. Estamos hablando cada vez menos de facturación y más de la cantidad donada a la Fundación WakaWaka. El aspecto social del desarrollo es muy inspirador y nos motiva a diario. Una cosa está clara, tenemos ideas suficientes para continuar durante décadas.