Hippokamp es un homenaje al mobiliario como forma de arte: la respuesta de una silla lounge a una sinfonía orquestada por Peter Qvist. Con esta silla, el arte de la ingeniería se une a la poesía en toda su simplicidad. El nombre Hippokamp procede del griego hippokamp, que significa “caballito de mar”. La mayoría de las veces, actúa como un animal mitológico de montar en serpiente, a veces con alas, tirando del carro del dios Poseidón. Con Hippokamp, han creado un pequeño “caballito de mar” en forma de taburete.

El sillón Hippokamp se compone de una chapa de abedul laminada, aceitada y encerada individualmente para dar a la madera un acabado suave y sedoso. El diseño del producto se realiza con tecnología 3D. Una vez encontrada la forma básica, el objetivo es definir las líneas en su totalidad manteniendo una buena unión entre los elementos. Tras varios prototipos de trabajo perseverante, se define el diseño final. Las diferentes piezas de madera se procesan con una fresadora generando un mínimo de desperdicio del material original. Los bordes se redondean a mano y cada elemento se lija a su vez a máquina y a mano.